Es dar la vuelta en contra del viento, se divide en tres pasos, siempre empezando en una ceñida, si estuviéramos en otro rumbo, primero habría que orzar e ir cazando las velas hasta navegar con buena velocidad y las velas correctamente cazadas, para posteriormente seguir estos pasos.
1º Orzamos empujando el timón, hasta dejar el barco proa al viento intentando no quedarnos sin velocidad. Nos iremos situando en el centro del barco pasando por debajo de la mayor.
2º Cuando el barco esté proa al viento estaremos cambiándonos de lado, el patrón mantendrá el timón en la misma posición que estaba cuando iniciamos la maniobra, pasando la caña por detrás de la escota de la mayor hacia el lado contrario, manejando el timón durante esta fase por la barra trasversal que une los dos timones. En este punto, el patrón debe aflojar un poco la escota de la mayor, para quitarle tensión y que pueda cambiar un poco de lado el carro de la mayor. El proel dejará el foque en el lado que estaba (acuartelado) y tendrá las dos escotas (roja y verde) en las manos, situándose pegado a la base del mástil.
3º Intentaremos no perder la velocidad para que nuestro barco siga la maniobra y consiga llegar al rumbo de la nueva ceñida. El patrón ya estará cambiado de lado y mirando hacia delante para tener una referencia clara del nuevo rumbo, cogerá la caña desde el lado nuevo (nueva amura) manteniendo siempre la posición del timón, para que el barco realice un giro constante. Muy importante tener en cuenta, que lo que antes, durante el primer paso, era orzar, ahora, al estar en el otro lado es arribar. Una vez estemos en el nuevo rumbo, el patrón vuelve a tensar correctamente la mayor. El proel también se habrá cambiado de lado y cuando el barco esté en el nuevo rumbo, soltará el foque del lado donde estamos, que ahora es barlovento, y lo cazaremos por el de sotavento.